Resumen Modulo II
V. Objetivos y características de los programas y acciones preventivas dirigidas a la familia
- Niveles y ámbitos de prevención
han señalado la importancia de la prevención en la reducción del creciente coste personal y social asociado al consumo de drogas.
1.1. Los niveles de la prevención
El concepto de prevención puede tener múltiples significados
Así habría una prevención primaria que intentaría evitar la aparición del problema, una prevención secundaria que buscaría reducir su impacto negativo mediante la intervención por último, una prevención terciaria que reduciría las secuelas ocasionadas por lo que
desea prevenir, introduciendo de forma temprana las medidas rehabilitadoras.
La prevención universal tiene como destinataria a la población general, sin tener en cuenta el nivel de riesgo de los individuos; la prevención selectiva se dirige a individuos o subgrupos que presentan un riesgo más elevado que el promedio, y por último, la tiene como destinatarios a los individuos de alto riesgo que presentan una mayor probabilidad de adquirir el trastorno
1.2. Los ámbitos de la prevención
Se entiende por ámbitos, aquellos espacios o contextos donde se desenvuelve la vida de
los individuos y que tienen relevancia en la conformación de los factores de riesgo y
prevención.
El contexto familiar tiene una gran importancia, debido a que la familia es un agente
socializador de primer orden la familia es un agente de gran importancia en modular la presencia de otros factores de riesgo
Tipos de prevención familiar
Nos encontraríamos con prevención familiar universal, selectiva e
indicada.
Pueden existir programas efectivos
De acuerdo con la fase evolutiva a la que van dirigida, los programas pueden focalizar su atención en familias que tengan hijos en las siguientes etapas:
- Embarazo y desarrollo temprano (hasta 1 año)
- Primera infancia (0-5 años)
- Infancia (6-12 años)
- Adolescencia temprana (13-14 años)
- Adolescencia (15-17 años)
- Adultos jóvenes (18 en adelante)
Objetivos de la prevención familiar
El objetivo de los programas de prevención familiar es modificar la presencia de factores familias, reduciendo o eliminando los primeros e incrementando los segundos.
Los factores estructurales o bien son de difícil o imposible modificación, o bien se
encuentran fuera de la esfera legítima de acción de los programas de prevención.
4.2. Aproximaciones o enfoques en la prevención familiar
− Apoyo familiar domiciliario
− Formación parental
− Formación en habilidades familiares
− Terapia familiar
Este tipo de programas se dirigen a las familias desde una perspectiva radicalmente
escolar.
La parte familiar de estos programas tiene como objetivo incrementar la implicación de los padres en las tareas escolares, reforzando la relación familia – escuela, y mejorando así la gestión familiar.
Factores relacionados con el éxito de las intervenciones familiares
Es posible entonces que un mismo programa aplicado de la misma forma a poblaciones
aparentemente idénticas, pero en contextos diferentes, produzca resultados distintos.
5.1. Características del programa y sus componentes
En un estudio meta-analítico (Kaminski, et al., 2008) en el que se analizaron 77
evaluaciones publicadas de programas de entrenamiento parental, se hizo un análisis de
los componentes que contribuyen de una forma más decisiva al éxito de esos programas.
Los resultados indicaron que los programas más eficaces tienen componentes que
incrementan las habilidades de comunicación emocional y las interacciones positivas
padres – hijos, enseñan a los padres habilidades educativas como el uso del tiempo fuera se menciona frecuentemente que el timing de la aplicación es esencial
Un factor muy importante que modula la efectividad del programa es el sexo de los
adolescentes que lo reciben
Por último, en un extenso análisis de los programas de formación de padres se pudo comprobar que este tipo de intervención funciona peor con las familias que tienen menos recursos
5.2. Captación y retención de familias
La captación de las familias es el mayor talón de Aquiles de la aplicación de los
programas de prevención familiar universal
Las familias de los chicos y chicas de menor edad que acuden al programa es más probable que tengan hijas y que sean de raza blanca mientras que entre las familias de los jóvenes de más edad (13-16 años) predominaban las que tenían más problemas de funcionamiento familiar, menor consumo de drogas en los jóvenes y pertenencia a una minoría étnica.
Las variables que más influencia tuvieron en la captación de las familias fueron el número de hijos, el nivel educativo de los padres, el uso de drogas por parte de los hijos, la presencia de conflicto familiar, el estilo de crianza, las relaciones padres – hijos y el patrón de comunicación familiar.
5.3. Sesiones de recuerdo
Las intervenciones preventivas son muy limitadas en el tiempo y se pretende que sus
efectos alcancen un período temporal muy dilatado
Sin embargo, no tuvieron ningún efecto en hiperactividad, habilidades sociales y liderazgo. No hubo tampoco diferencias significativas en las prácticas parentales, ni en las relaciones familiares. No se evaluó el consumo de drogas.
VI. Estrategias para captar, motivar e incentivar la colaboración y la participación en los programas preventivos centrados en la familia
Introducción: ¿cuál es el problema?
Uno de los mayores retos a los que se enfrenta el campo de la prevención familiar es
comprometer a los padres en dichas intervenciones.
Los factores que contribuyeron a la baja participación de los padres en el programa
(1) la negación del problema por parte de los padres,
(2) el alto consumo paterno de alcohol y tabaco informado por los hijos, –que
puede provocar que los padres se sientan intimidados o piensen que van a ser criticados
(3) la falta de familiaridad con la escuela,
(4) la situación marital, –los padres solteros participan menos–, y
(5) el sexo del hijo, –los padres de las chicas participan en mayor medida que los de los chicos
Obviamente los efectos preventivos de las charlas son mucho menores, pues no puede
pretenderse dotar a los padres de los conocimientos, actitudes y comportamientos
necesarios para actuar como agentes preventivos con una simple charla informativa o con
un simple vídeo
También pueden ser útiles para detectar familias en riesgo y orientar o derivar a otros
recursos o intervenciones preventivas.
Estrategias de reclutamiento
No obstante, a pesar de las dificultades previamente mencionadas, diversos autores han ofrecido estrategias de diverso alcance entre las que podríamos destacar las siguientes
− Los esfuerzos de captación de familias son significativamente más rentables en
aquellos programas que mantienen una colaboración estrecha con las actividades
de la comunidad
− Esta aceptación puede ser aumentada ofreciendo intervenciones congruentes
desde un punto de vista cultural
− El personal dedicado al reclutamiento debe estar especialmente entrenad
− Los incentivos por participar y la provisión de fondos para contrarrestar las
barreras para la participación (transporte, cuidado de niños…) son indispensables
catalizadores de una participación fiable.
De forma más concreta, proponen las
siguientes estrategias, basadas en un estudio longitudinal de tres años con una muestra
de familias con hijos de 11 y 12 años:
− Identificar a la persona adecuada para aplicar el programa.
− Transmitir claramente el objetivo del programa.
− Construir una relación basada en la confianza mutua, el respeto y la igualdad.
− Respetar la intimidad de los padres y fomentar, al mismo tiempo, una vinculación
positiva entre los miembros del grupo.
− Procurar un acceso fácil, con recordatorios e incentivos.
− Ser flexible pero persistente.
Otro estudio se centró en examinar específicamente cuáles serían las estrategias más recomendables para promover la adherencia de los padres a un programa de prevención tabaco y otras drogas desarrollado en el contexto escolar.
La principal estrategia y núcleo del reclutamiento de los padres sería conseguir
que los hijos estén interesados en el programa y, por lo tanto, insistan a sus
padres para que participen.
En segundo lugar, los requerimientos básicos para la participación consistieron en
proveer a los padres y madres de transporte, cuidado de los hijos y pequeños
incentivos materiales
En tercer lugar, defienden la posibilidad de combinar distintas estrategias y
canales de comunicación con los padres para promover su implicación en la
intervención preventiva.
En cuarto lugar, los autores señalan la importancia de las actitudes del equipo
directivo y del personal del centro escolar hacia los padres en la decisión de los
padres de participar
La quinta estrategia se refiere a la importancia de cuidar al máximo la convocatoria
al programa
La última estrategia sería fomentar en la escuela actividades previas que también
soliciten la colaboración de los padres
Veámoslas por partes: respecto de la preparación previa para la tarea de reclutamiento en primer lugar, que es muy conveniente afilarse con una institución u organización comunitaria que goce de cierto prestigio
En segundo lugar, se debería usar una plantilla de personal entrenada para actuar como
reclutadores
En tercer lugar, los reclutadores que se centren en captar población de alto riesgo deben
tener presente que es probable que este tipo de familias tengan problemas diarios de
convivencia
También se puede describir el programa como una oportunidad de ayudar a la familia
Según Hogue et al. (1999), los padres suelen responder de acuerdo a alguno de los tres siguientes patrones:
Los padres expresan alguna preocupación sobre su hijo, como problemas escolares o conductas oposicionistas
Los padres relatan que actualmente no tienen problemas con su hijo, pero que
están preocupados por los problemas que pudieran aparecer durante la
adolescencia.
Los padres no comentan ningún problema o preocupación acerca de la situación
familiar actual y se muestran confiados en sus aptitudes para manejar los
inconvenientes que puedan surgir en el futuro
Si durante esta visita la familia accede a participar en el programa, debe concertarse una
cita antes de que el monitor se vaya.
2.1 Posibles alternativas
Algunos autores defienden las alternativas de prevención no presenciales ya que los
problemas en la asistencia a los programas impiden el alcance de los objetivos de las
intervenciones preventivas. Este tipo de actividades suelen ser más flexibles en sus
tareas y horarios dado que utilizan materiales escritos o actividades que han de ser
completadas por las propias familias en sus hogares.
2.2. El papel de los incentivos
El uso de incentivos económicos para modificar la conducta en el ámbito de la salud
parece gozar de cierta notoriedad en la actualidad
Tal es el caso de la intervención en problemas de salud como la tuberculosis o las
vacunas contra la hepatitis B, donde se comprobó que el uso de pequeños incentivos
mejoró la adherencia a las prescripciones médicas en adultos.
Si nos centramos de manera específica en la prevención del consumo de drogas
encontramos varios estudios que hallaron diferencias significativas en la participación en los programas de prevención en función de la utilización de incentivos
Tales incentivos se entregaban tras finalizar cada una de las siete sesiones principales del programa.
Durante las sesiones de mantenimiento, aplicadas dos meses después, este
incentivo no se entregó.
La entrega de estos incentivos aumentó el número de padres que asistieron al programa
respecto al grupo control y también redujo las tasas de abandono, aumentado así la
adherencia al programa.
2.3. La importancia del centro escolar
Es conocida la importancia y la influencia que tiene el centro escolar tanto en la formación académica de los jóvenes como en diversos aspectos del desarrollo durante la infancia y la adolescencia.
Numerosos estudios citan algunos de los beneficios de esta participación e implicación de los padres en las actividades del colegio de sus hijos, que incluyen mayor rendimiento académico, actitudes positivas hacia el estudio, menor absentismo escolar, aumento del tiempo que los estudiantes pasan con sus padres y mejores niveles académicos.
Si nos centramos de manera precisa en el estudio de la asistencia a los programas de
prevención encontramos que varios autores establecieron acuerdos con colegios locales
para asegurarse la asistencia de los participantes a los que se dirigía el programa.
En este sentido Calafat y Amengual (1999) mencionan una serie de condiciones
necesarias para la participación de los padres:
− Debe informarse a los padres de los proyectos de la escuela acerca de la
prevención
− Es necesario que los padres perciban esta invitación como auténtica
− No se debe concentrar toda la responsabilidad de la educación en los padres
− Es necesario tener en cuenta que para muchos padres resulta complicado abordar
algunas cuestiones aisladamente en casa
− Puede ser que el profesorado perciba la participación de los padres como una
injerencia
Conclusiones
Un ingrediente esencial para el éxito de las intervenciones preventivas de carácter familiar contra el consumo de drogas es que los padres asistan a tales intervenciones, y además lo hagan motivados por el bienestar de sus hijos.
Al mismo tiempo, en el momento en que la actividad preventiva exige un esfuerzo
continuado se producen altas tasas de abandono. Las razones para que los padres no
acudan pueden ser muy variadas, pero no caben dudas acerca de que éste es un asunto
fundamental que probablemente requiera de una gran cantidad de recursos para obtener
resultados no siempre satisfactorios.
Parece ser que dentro del conjunto de variables que se citan en la literatura como
predictores y relevantes de la participación de los padres se revelan como más
significativas las siguientes:
- El nivel educativo de los padres.
- Los beneficios percibidos por la intervención.
- Las creencias y actitudes hacia la misma.
- Las barreras para participar (tiempo, horario, etc.).
- El estatus marital.
- El nivel de ingresos familiares.
- Las actitudes de los padres hacia el personal del centro escolar o la credibilidad de
dicha institución. - El uso de incentivos contingente a la participación.
Formación intensiva de los orientadores que llevarán a cabo el programa de prevención y las tareas de reclutamiento.
Fase previa
- Distribuir material impreso
- Enviar una carta personalizada
- Llegar a los padres a través de los hijos
- Ofrecer «becas» a familias sin medios
Fase de reclutamiento
- Contextualizar la intervención preventiva en el marco de otros problemas globales del funcionamiento familiar.
- Entrega de material
- Entregar incentivos promocionales
Fase de Intervención
- Entregar diplomas al finalizar la última sesión.